Una cultura organizacional fuerte y positiva es el pilar del éxito empresarial. Según Gabriel Massuh, todo emprendedor debe saber el valor de sus equipos y entender cómo fortalecer permanentemente sus grupos de trabajo.
Quien se convierte en líder debe tener como rol principal cultivar un entorno en el que los equipos puedan crecer y prosperar.
Esto implica saber el lugar y función que cumple cada persona y proporcionarle así no sólo los recursos técnicos y prácticos para su desarrollo, sino también visión, valores y liderazgo.
Sin embargo, no existen estrategias estándar que te ayudarán a maximizar las capacidades de tu equipo, ya que cada liderazgo se nutre y cultiva según la visión de cada uno.
Pero para Gabriel Massuh, que ha liderado una empresa exitosa por 30 años, la clave está en identificar, delegar y seleccionar meticulosamente para consolidar equipos estables y duraderos.
Fortaleciendo la cultura corporativa
En el mundo de los negocios, cada detalle puede ser el diferenciador entre el éxito y el fracaso. Esto definirá la cultura corporativa y su rol e influencia en las personas.
Hablar de cultura organizacional no es solo un concepto de moda en el ambiente de las startups o las empresas consolidadas. Hoy es una herramienta estratégica esencial para construir equipos de trabajo que no solo sean efectivos sino también resilientes y comprometidos.
¿Cómo los emprendedores pueden cultivar una cultura y un liderazgo que favorezca la creación de equipos de trabajo exitosos? Según Massuh, el reclutamiento y retención de los talentos es solo una de las tantas alternativas.
¿Qué entendemos por cultura corporativa?
La cultura corporativa se refiere al conjunto de valores, expectativas y prácticas que guían y moldean las actitudes y comportamientos de todos los miembros de una organización.
Según Harvard Business Review, una cultura fuerte puede impulsar la lealtad y el rendimiento general de los trabajadores, mientras que una cultura débil puede llevar a una falta de dirección y compromiso.
El empresario Gabriel Massuh establece una serie de pasos que le ayudaron a construir equipos sólidos y exitosos, entre los que destacan:
1. Definir valores y principios
Todo empieza con la definición clara de los valores que desea promover y proyectar una empresa.
Estos valores no deben resonar con la visión de la empresa y ser realistas y practicables. Empresas como Google han enfatizado valores como la «innovación» y el «respeto mutuo», que se reflejan en sus políticas y su entorno laboral.
2. Onboarding y retención de talento
La selección de personal en sus etapas iniciales debe alinearse con los valores corporativos.
Es crucial contratar a personas no solo por sus habilidades técnicas, sino por su ajuste cultural. Además, el proceso de incorporación debe reforzar estos valores, asegurando que los nuevos empleados entiendan y compartan la cultura de la empresa.
Para Gabriel Massuh, en su experiencia liderando equipos integrales, una orientación efectiva puede aumentar la retención de empleados y mejorar su desempeño a largo plazo.
“Nunca descuidar el valor de las personas ni cuánto estamos dispuestos a invertir en el aprendizaje continuo y otros valores. Nuestros trabajadores son el principal activo a cuidar y respetar”, reflexiona.
3. Fomentar espacios de comunicación
Una comunicación transparente y bidireccional es fundamental para cualquier equipo exitoso. Debe incentivarse la expresión de ideas, preocupaciones y sugerencias de todos los miembros del equipo.
Diferentes empresas de RRHH y tecnología utilizan plataformas de comunicación interna para asegurar que todos los niveles de la organización puedan comunicarse de manera efectiva y horizontal.
4. Reconocimiento y recompensas
Reconocer y recompensar el buen desempeño es esencial para motivar y mantener la moral alta. Esto no siempre implica bonificaciones o promociones, reconocimientos u oportunidades de desarrollo profesional.
Otros incentivos no monetarios también son efectivos. Según estudios, los trabajadores que sienten que su trabajo es valorado son más propensos a ser productivos. A través de los años, Gabriel Massuh Isaías comprendió que promover estas iniciativas logran equipos sólidos y comprometidos, “Gracias a una cultura clara y respetuosa, hemos podido crecer a lo largo de los años conformando un equipo integral de más de 200 trabajadores y proveedores que confían en nuestra empresa”, detalla.
Por otro lado, un incentivo fuerte es reconocer una cultura que valore el bienestar de sus trabajadores y promueva un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal no solo aumenta la satisfacción sino que también reduce el agotamiento.
Empresas como Netflix, por ejemplo, han adoptado políticas de vacaciones flexibles y horarios de trabajo ajustables que han demostrado ser exitosas en mantener un equipo feliz y comprometido.
La construcción de equipos de trabajo exitosos es una tarea compleja que requiere más que solo habilidades técnicas. Necesita una cultura corporativa sólida y coherente que soporte y promueva estos ideales, algo de lo que Massuh sabe con más de 30 años en el ruedo. ¿Los trucos? Ser líderes proactivos, creativos y atentos a su principal activo humano.
Los emprendedores deben ser proactivos en la creación y mantención de esta cultura, asegurándose de que sea inclusiva, sostenible y sobre todo efectiva. Una cultura corporativa bien gestionada no solo mejorará el ambiente de trabajo, también impulsará la innovación y la productividad a largo plazo.